AL MORIR 

De esos comentarios que uds me escriben y yo leo. Este definitivamente me tocó. No soy de responder estas cosas pero esta vez lo haré: la muerte, una amiga de la vida que siempre entra sin ser gratamente recibida. Amiga porque vivir eternamente debe ser un infierno, no bien recibida porque se lleva a quien amamos. Los budistas celebran la muerte, otras religiones la lloran, lo cierto es que los que la lloramos, no es por quien se muere sino por los que nos quedamos sin el ser querido. Sabes que vas a morir? La angustia es dejar todo arreglado, triste por saber que te perderás de ver la vida de los demás. Pero hay un consuelo, al menos una posibilidad. Puede que haya algo después de la muerte y si eso es así, para darte cuenta de que hay algo debes tener conciencia, percepción y lenguaje, es decir, atributos que también tenías en vida. Entonces si hay algo, vas a vivir después de la muerte y no te perderás nada sino que ganarás todo. La otra posibilidad es que no haya vida después de la muerte, y en ese sentido entonces realmente nada importa. Vas a dormir para siempre y no sabrás nada de nada. Ambas posibilidades son buenas, en una tienes todo un universo por descubrir y sabrás que cuando tus seres queridos mueran, vivirán lo que tu estás viviendo. Si no hay nada, nada sabrás, así que nada dolerá. Lo importante, lo realmente importante es como estas viviendo estos momentos. Recibes amor? Das amor? Te estas despidiendo? Se están despidiendo? Estas disfrutando a todo lo que da estos momentos que aún tienes?. La mirada de un niño, la sonrisa del anciano, la mano que se extiende, el abrazo que se da, la comida que se disfruta, el sexo que se tiene, cada momento valorado, sentido atesorado. La vida es eso, sentimiento, corazón, pasión y amor. No son tus últimos momentos, son los únicos que tienes, a cada día, a cada instante. Todos sabemos que vamos a morir, solo que tu sabes posiblemente cuando, así que la diferencia está en que tu puedes atesorar con más pasión lo que vives a diferencia de aquellos que nos creemos eternos y siempre pensamos que eso nunca nos va a pasar, dejando pasar momentos inolvidables, ocupando de pequeñeces sin sentido. Mi abrazo