
En un post publicado en estos días en mi Instagram @psicovivir, alguien me daba un consejo y yo le respondí que cuando lo necesitara le prometía seguirlo.
Eso desató una controversia en los comentarios y la razón de eso tiene que ver con lo que se cree del psicólogo, lo que se cree de mi y lo que se cree sobre los consejos.
1. Se cree que el psicólogo da consejos. Eso es un mito. Los psicólogos generalmente no los damos. Dependiendo de la escuela psicológica el psicólogo hace reflexiones para lograr que el individuo se dé cuenta (humanismo), técnicas de reforzamiento y razonamiento inductivo (cognitivismo) o preguntas mayeuticas con interpretación introspectiva (psicodinámica).
2. Se cree que yo debo comportarme «como un psicólogo». Eso es una cosa contraria a mi. En redes no soy psicólogo y tengo una personalidad específica que a través de años de terapia y auto conocimiento, he logrado forjar un carácter bastante estructurado, sin miedo al que dirán, absolutamente libre de presiones por juicio popular, y sobre todo ajeno a regirme por criterio sociales de como debe comportarse un psicólogo. Soy como soy y ud es libre de aceptarme o no. Si ud me sigue en redes yo se lo agradezco muchísimo, pero si se va, ese es su asunto y me parece altamente ridículo y estúpido que me lo diga como si eso me importara o me afectara. Conmigo se queda quien me quiere. Quien no, es invitado a irse. Siempre. Yo no estoy para complacer sus expectativas sobre mi.
3. Los consejos son buenos cuando se piden. Son necesarios en la vida sobre todo cuando el individuo está abierto a eso. Pero cuando no son pedidos, generalmente son un juicio, una crítica vedada pero sobre todo hipócrita, ya que no son capaces de hacer la crítica directa sino que lo lanzan tipo «es por tu bien». Un consejo es la forma de hacer algo basado en la experiencia personal de quien lo emite, y obliga a quien da el consejo, a seguirlo siempre. Yo por eso generalmente no doy consejos, ya que no siempre pienso igual y mi libertad personal hace que no siempre siga ni mis propios consejos. Por eso difícilmente doy consejos, y cuando no son pedidos, tiendo a rechazarlos.