Hablemos de la pobreza. Hay dos clases, la pobreza de ideas y la condición económica. Decía Wayne Dyer que la pobreza es una decisión. Yo no estoy de acuerdo. A veces las condiciones sociales y políticas te llevan a ser pobre, hablando económicamente. Lo que si coincido es que el mantenerte así, si puede ser una decisión, y eso es debido a la otra clase de pobreza: la de las ideas. La posibilidad de preparar siempre viene llevada de la mano de la inteligencia y la cultura. Difícilmente una persona con muy poca Cultura, tiende a prosperar, y quienes si lo hacen, es debido a que saben mucho (eso también es cultura) de su oficio. Lo que si no comparto es el vanagloriar la pobreza como síntoma de humildad. Gente que se jacta de la pobreza como consecuencia de sus características personales. Esa es una forma de incentivar la falta de ambición y hacer creer que características como la honradez y la honestidad, no tienen nada que ver con la riqueza. Quienes así piensan, sufren de un profundo complejo. Ud puede ser honrado y honesto, y aún así, ser prospero.
¿POBRES PERO HONRADOS?
Publicado por Psic. Alberto Barradas
Psicólogo con mención en clínica que un día se montó en su moto, se hizo varios tatuajes, vendió el diván, se olvidó que se había graduado cum laude y empezó a difundir reflexiones muy personales sobre la vida, llevando un mensaje donde la mayoría se pudiera identificar y verse reflejado en las distintas facetas de la vida. Hoy convertido en conferencista lleva sus reflexiones a nivel nacional e internacional, donde con un lenguaje cotidiano, lleno de humor y a veces sarcasmo, intenta ayudar a quien así lo desee. Radicado en Valencia, Venezuela Ver todas las entradas de Psic. Alberto Barradas