En medio del primero día de capilla ardiente en homenaje a Chavez, la primera pregunta que me viene es:  yo soy Chavez?

Y la verdad es que a veces me he comportado como el.  Si, debo admitir que a veces he sido como Chavez

Y en muchas ocasiones admire profundamente sus palabras y hasta me emocioné con fervor patriótico en sus arengas

Varias veces pensé que Chavez tenía razón y que realmente no lo comprendíamos

Incluso me aferraba a la idea de que Chavez era un hombre de buenas intenciones pero muy mal acompañado

Durante un tiempo pensé que Chavez era un idealista, así como yo, que quería realmente un país mejor

Mientras eso pasaba en mí, la oposición no me daba muchas alternativas. Rechazaba más de lo mismo

La realidad es que mientras más veía el discurso debo admitir que más me enamoraban las ideas nacionalistas de Chavez

Yo venía de la cuarta república y si vi represiones, hambre y miseria. Yo no me engañaba, la cuarta fue terrible

Yo estaba claro al igual que Chavez que los pobres eran mayoría y que los políticos se habían olvidado durante 40 años de ellos

Realmente yo me debatía durante un tiempo entre mi agrado por sus ideas y cierto rechazo a su forma de expresarlas

De hecho, económicamente en la cuarta yo vivía en gran pobreza y a pesar de ser profesional, vivía muy pobremente

No debo negar que en esos tiempos de duda ideológica, mi economía iba creciendo. Yo le otorgaba ese merito a Chavez

Pase de vender refrescos en la ventana de mi casa a taxista, luego a vendedor de seguros y por último a psicólogo.

Todo en el tiempo de Chavez. Mi corazón estaban alineadas con sus ideas, pero algo en mi empezó a rechazarlo

Ese rechazo hacia él era primero muy pequeño pero de un momento a otro se hizo grande y un buen día, me hice opositor a el

Que me hizo cambiar de opinión sobre Chavez? Su reacción al paro petrolero. Lo vi odiar y no comprender el por qué.

Luego todo en mi vino en picada. Observé a un Chavez ególatra, soberbio, prepotente y excluyente, ya no era el presidente de todos

Entonces de la noche a la mañana el viejo vendedor de refrescos que era yo me convertí en burgués neoliberalista salvaje por pensar diferente

Resulta que el viejo taxista que fui una vez ahora era un apátrida, escuálido e imperialista solo porque no estaba de acuerdo con el

Yo tenía una dicotomía terrible: sus ideas me seguían gustando, pero ahora resulta que Chavez me odiaba porque algunas no me gustaban

Yo nunca le hice nada a Chavez y resulta que el me insultaba, despreciaba y yo medio perdido

En esos tiempo me metí en el foro de aporrea a ver si podía entender y ver si era yo el errado. Me sacaron a patadas

Luego cometí el error más grande de mi vida: empecé a unirme a la oposición

Empecé a militar en partidos políticos nuevos y viejos de la oposición. Lo que vi fue dantesco y solo recordar me da asco

Imagínense el tremendo dilema en mi cabeza: la oposición era vomitiva, la mayoría de las ideas de chavez me gustaban, pero el me odiaba

Me paso algo más: empecé a ver el deterioro del país. Solo un ciego no podría verlo. Yo de verdad me sentía muy perdido

Chavez le echaba la culpa a la cuarta, yo sabía que ellos eran fatales pero el gobierno era de él. Que enredo tenía yo, inmenso

La oposición la odiaba yo y el chavismo me odiaba a mí. No tenía camino, no tenía norte. Yo era un paria de la vida

Solo me quedo algo por hacer: convertirme en un opositor a Chavez pero no alinearme con la oposición

Fue una solución? NO. Resulta que sin querer me convertí en un nini y entonces también fui rechazado

Donde estaba yo? Me gustaban las ideas de Chavez, rechazaba su mal gobierno, el chavismo me odiaba y la oposición también

Ya yo no sabía que hacer. Yo veía que el gobierno era malo pero los pobres lo amaban. La oposición era fatal y yo opositor o nini

Por fin vino la luz a mí: Me di cuenta que yo era el comandante de mi vida y mis ideas eran eso, MIAS

Literalmente mande al zipote al chavismo, a la oposición y a los nini. Cree mi propio partido donde yo soy el único militante y presidente

Puse orden en el caos: Chavez tenía buenas ideas, era un pésimo gobernante, la oposición no servía y no había nada que hacer

Así transcurrí algunos años. Escuchaba a Chavez de vez en cuando, a la oposición de vez en vez y veía a mi país destruirse

Yo no soy neoliberalista salvaje y tampoco soy socialista. Yo encontré mi centro, mi propio ser. Ya nadie me mandaba mis ideologías

Al final del camino me convertí en un intento de objetivo y mis criterios políticos empezaron a ser menos apasionados o sugestionados

Durante los últimos años he adversado al TERRIBLE gobierno de Chavez mas no al hombre. El hombre que murió ayer yo lo respeto

Nunca me tildaré de chavista y si se lanza Capriles votaré por el. No porque sea de la oposición sino porque este gobierno es malo

Al final del camino sigo siendo rechazado por todos, pero ahora pasa algo muy hermoso: yo no me rechazo a mí mismo

Entonces terminando como empecé: yo soy Chavez? No, no lo soy. Soy Alberto Barradas, con criterio propio y deseando un mejor país

Chavez, espero descanses en paz. Hiciste historia y nunca te olvidaremos. Te respeto y respetándote te digo: hiciste un pésimo gobierno

A los que me leen: ya estoy acostumbrado al rechazo. Aprendí a vivir con eso. No pierdan el tiempo criticándome. Yo ya pagué mis errores